Apostar a la desmemoria.
Tras nueve años de ser alcalde de Mérida, no vemos un cambio en nuestra ciudad en donde persiste el clasismo, en donde sigue dividida entre los del norte y los demás.
La ciudad que se vuelve acuática cada vez que llueve, en donde la policía municipal solo se dedica a reprimir y perseguir a la comunidad LGBT. En donde golpean hasta la mu3rt3,
Mientras se reparte con su hermano y sus amigos el presupuesto, en donde nos deja una deuda multimillonaria por el escándalo de las lámparas chinas, dinero que pagaremos los meridanos por muchos años.
Renan le apuesta que nos olvidemos que hoy es aliado del Calin Sánchez, uno de los golpeadores del paso deprimido y dueño de antros y bares de mala muerte en donde se vende selva al por mayor y reina la trata de blancos.
Que se alió con el pri, ese que con sangre y sacrificios logramos sacar del estado, hoy se reúne con ellos, con los defraudadores, con los corruptos, como dice el dicho: dime con quienes andas y te diremos quién eres.
Le apuesta a la amnesia del pueblo, pero los yucatecos nunca olvidamos.